El Atlas del idioma en anteojos,
molina con tentáculos gramáticos
la ruina de los monos teleastas.
Saber que estupidemia nunca aplasta.
Cuando modula… huyen los gorgojos.
Cuando lidian los gallos de sus ojos,
cercena al galicismo de la orgía
de los labios de su misantropía,
Cuando mira la cima del latín
de sus ojeras, su iracunda voz
fecunda la canción del pesimismo.
Y ruge el leviatán desde su mente
comprimiendo con la euforia humanista
a los libros de arrugas de su frente.
MAD era un genio poco comprendido, tenia un estilo muy personal y un poligrafo con alma,
ResponderEliminarGran tributo a una luminaria.
Hola Rubend, de acuerdo, es una luminaria inmortal, mi tributo infinito al genio MAD, gracias por tu comentario.
ResponderEliminarArturo...esta escrito al César lo que es del cesar y a MAD lo que es de MaAD, no me perdía sus programas e incluso de repetición que se pasaba...Sin duda un gran vació difícil de llenar.
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